El portavoz del PP del Ayuntamiento de Elda ha acusado al equipo de gobierno PSOE-Compromís de querer hundir el Museo del Calzado. Estas palabras, viniendo de quien vienen, no sabemos si denotan más desvergüenza que desmemoria. Es curioso las vueltas que da la historia, el PP ha tardado tres años en hablar de los problemas financieros del Museo del Calzado para ver si nos olvidábamos de su gestión durante los ocho años anteriores que ellos gobernaron

Cuando llegamos al gobierno hace tres años el Museo del Calzado sí que estaba a punto de desaparecer. Estaba en la UVI, ya que arrastraba una deuda de más de 150.000 euros, parte de ella en un préstamo de 100.000 euros con una entidad financiera, fruto de la mala gestión en ese periodo que hacía inviable no sólo el el funcionamiento ordinario, sino el evento de la Mejor Calzada, cuya financiación también depende del Ayuntamiento de Elda. Por no hablar del incumplimiento continuado con el Protectorado de fundaciones de la Generalitat al no presentar, como es preceptivo, ni las cuentas anuales ni la renovación de cargos de su patronato durante años.

En efecto, como apunta el PP, la mayor parte de la financiación del Museo de Calzado viene de la subvención del Ayuntamiento de Elda, y nosotros hemos tratado durante estos tres años de gobierno de solucionar este difícil problema ya enquistado durante muchos años. Primero le aumentamos la subvención para el ejercicio de 2016 hasta los 121.000 euros, incluyendo una retribución en especie de16.000 euros para que el evento de la Mejor Calzada se pudiera financiar y no desapareciera. Y no sólo se ha mantenido, sino que se ha ido potenciando en las sucesivas ediciones con una fórmula que pensamos es la adecuada para que este evento pueda desplegar todas sus posibilidades.

Es verdad que no han sido suficientes estas medidas, porque el fondo del problema de financiación del Museo del Calzado viene de dos circunstancias que no han sido fáciles de abordar. Primera, su carácter de fundación privada, que impide que el Ayuntamiento, al día de hoy, pueda asumir económicamente su funcionamiento, que se pudiera municipalizar. En segundo lugar, la subvención que recibe, que está regulada por la Ley General de Subvenciones, en vigor desde 2013, penaliza que el Museo del Calzado obtenga fondos propios a la hora de liquidar la subvención del Ayuntamiento, lo que explica los 25.000 euros que ha tenido que devolver como consecuencia del superávit obtenido en su cuenta de resultados del último ejercicio. Por supuesto que el equipo de gobierno no está de acuerdo con esta devolución, porque añade más dificultades económicas en la gestión del Museo, pero es lo que dice la ley y actuar de forma contraria sería prevaricar. Y no queremos pensar que el PP desee que el equipo de gobierno prevarique, ¿o sí?

Para evitar que que esta situación vuelva a producirse y los ingresos propios del Museo, que van aumentando como consecuencia de la gestión de la actual dirección, no penalicen en lo sucesivo la subvención que recibe del Ayuntamiento, se han modificado los términos del nuevo convenio con el objetivo de que el Museo pueda percibir íntegramente la cantidad convenida para cubrir los gastos generales y el desarrollo de actividades. Pero hay que tener en cuenta que el mayor problema económico del Museo es la deuda que se arrastra con la Fundación Paurides, que no es un concepto subvencionable y que el Museo debe afrontar con ingresos propios. Ese es el gran hándicap económico del Museo en estos momentos cuyo origen está en la gestión del PP y cuyas consecuencias se están pagando ahora y en próximos ejercicios, según el calendario de pagos acordado.

No obstante a todos estos avances que poco a poco están revirtiendo la situación económica del Museo que se encontró hace tres años el equipo de gobierno PSOE-Compromís, la cuestión fundamental que debe plantearse es cómo hacer que el Museo del Calzado sea viable y pueda cumplir con su papel de referente del sector calzado. Para ello es imprescindible una mayor implicación de empresarios y ciudadanía con el Museo, que confiemos y apoyemos su gran potencial, en muchos aspectos todavía por explotar. Porque, al fin y al cabo, el calzado que Elda fabrica y vende en el mundo es fruto de lo bien que se ha sabido hacer a lo largo de su historia, y eso hay que ponerlo en valor. En esa dinámica está el equipo de gobierno, de ahí que solicitamos del PP y del resto de formaciones políticas que deje de utilizarse políticamente el Museo con tácticas marrulleras que solo perjudican su imagen y descalifican a quienes exigen soluciones para los problemas que crearon ellos.

Equipo de Gobierno PSOE-Compromís